Muy pocas personas viven una relación abierta. A pesar de ello – y también solo por esta razón – cerca del 70% de las personas comprometidas en una relación, en algún momento siente el deseo de practicar sexo con otras personas.
Cerca del 50% convierte este deseo en realidad y comete una traición. Generalmente no es tan solo para compensar la falta de actividad sexual con su pareja. La fascinación por lo “prohibido” ofrece unos estímulos mayores.
Pero si deseas responder en algún momento a la llamada de la traición, ésta deberá pasar inadvertida a tu pareja, por lo que es necesario seguir algunas reglas de oro después de la aventura. Además, recuerda: La pareja sospechará inmediatamente cuando las cosas no sean como siempre.
Página de "aventuras" galardonada
No dejar huellas
Borrar las huellas de una traición a veces puede ser muy costoso. Sin embargo debes asegurarte de ello. Cuanto más consciente seas mientras las borras menor será el riesgo de que tu pareja descubra pequeñas huellas de la aventura.
Enviar SMS, e-mail o incluso llamar a tu amante no debe hacerse nunca con tu teléfono o con tu cuenta conocida de correo electrónico o desde una dirección utilizada también por tu pareja. Hacerlo de un modo desordenado y distraído significa contarle a tu pareja tu experiencia extra-conyugal. Ocurrirá en muy poco tiempo.
Compra una tarjeta de prepago para tu teléfono. Ésta puede ser siempre sustituida y utilizada para llamar o enviar mensajes a tu amante. Una tarjeta prepagada puede recargarse dónde y cuándo quieras. No existe un contrato que te podría desenmascarar.También es posible pagar en efectivo, de manera que no quede ninguna prueba en la cuenta. Haz lo mismo con el email. Igualmente en este caso, es suficiente con crear una nueva cuenta de correo electrónico. Selecciona un operador diferente al que utilizas con tu pareja. No memorices la contraseña en el ordenador. Introduce las direcciones de email a través de Outlook o programas similares, pero siempre separadamente de la página web del operador. De esta manera no dejarás ninguna huella.
Otra sugerencia: dile a tu amante que no te envíe ningún objeto de amor a tu dirección. Podéis hablar de todo durante vuestros encuentros. Después del cual – precisamente por su carácter secreto – no debéis tener contacto o reducirlo a lo mínimo.
Lo mismo ocurre con las marcas en el cuerpo o los olores extraños en la vestimenta. No experimentes con tu amante ningún tipo de sexo con el que puedas acabar en urgencias. Se aconseja además evitar arañazos o incluso chupetones. Éstos últimos son propios de la adolescencia y son ridículos en un hombre adulto. Sería difícil explicar a tu pareja por qué vuelves a casa marcado/a.
Tu amante y tú debéis estar seguros de no usar vuestro perfume antes de vuestro encuentro. Un perfume extraño en el cuerpo después de la traición se notará rápidamente por tu pareja. Y además, por supuesto dúchate después de la escapada. El lavado elimina los olores extraños y las huellas. Pero no utilices ningún gel en la ducha. La pareja lo olerá y se preguntará por qué hueles tan intensamente en medio del día.
Después del engaño, compórtate con tu pareja normalmente
Tu pareja te conoce verdaderamente bien. Si ya estás un poco implicado/a emocionalmente con otra persona, las pequeñas manías y excentricidades se notarán al momento. Si no quieres que el sexto sentido de tu pareja descubra de manera inmediata tu traición, deberás comportarte del modo menos llamativo posible.
No agasajes a tu pareja con flores y regalos si no lo hacías ya antes. Es más, los piropos, las felicitaciones, regalos o cosas similares no deben aumentar después del engaño si antes no tenías costumbre de hacerlo. Dichos actos mostrarán que no tienes la conciencia tranquila y quieres esconder algo. Además, quien generalmente por la mañana se levanta de mal humor y ahora es muy feliz apenas se despierta, no debe sorprenderse si su pareja comienza a hacer preguntas insólitas.
Así que, compórtate como siempre. Lleva tu móvil siempre contigo. Haz las llamadas lejos y no te escondas detrás de las puertas cuando estés hablando por teléfono. Tu amante debe saber que no debe llamarte cuando llegas a casa. El problema puede aparecer en cualquier momento, incluso si posees una tarjeta de prepago que no está en el teléfono.
No intentes aplicar en tu relación las prácticas sexuales que has experimentado con tu amante. Si el sexo era tedioso antes de la escapada, entonces deberá continuar igual. Presta atención a tus pantalones, bolsos y bolsillos. Controla que no hay resguardos de compras o notas de tu amante en ellos. Sin embargo, si perteneces a la categoría de personas que suele llevar pañuelos, toneladas de papeles y otras basuras en los bolsillos, deberás entonces continuar así después de la traición. Los bolsillos completamente vacíos son siempre un motivo para pensar dos veces en la situación actual.
Sé cauteloso
Sé siempre cauteloso con respecto a la escapada y nunca te dejes tentar por tu amante. No tengas sexo sin preservativo. Aunque ella te diga que está tomando la píldora, existen muchas enfermedades contagiosas de transmisión sexual que difícilmente podrás explicar a tu pareja en casa.
Además, no querrás ser padre repentinamente como consecuencia de una aventura. En ese caso , entonces no podrás esconderlo más a tu pareja y el engaño terminará seguramente en un desastre. Por ese motivo, piensa siempre en el sexo seguro. Te protegerá frente a los niños, las enfermedades y las preguntas embarazosas de tu pareja.
En este sentido, disfruta de tu experiencia de infidelidad lo máximo posible. Pero hazlo siempre con mucho cuidado y cautela de manera que tu pareja no lo note y nadie tenga motivos para sospechar.
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